Tras 28 años presente en el país, reforzará su actividad con la próxima apertura de una nueva oficina en Milán de 1.500 m².
El desembarco de Fagor Automation en Italia en 1990 no fue una elección aleatoria, sino una maniobra estratégica para seguir creciendo. Y es que para la compañía guipuzcoana “era vital tener presencia propia en el segundo mercado europeo de Máquina-herramienta”, según afirma su director de Negocio de CNC, Iñaki Sánchez.
Un factor al que se suman “su carácter innovador y la alta tecnología de las máquinas producidas allí, que se equipan con los sistemas de control y captación de Fagor Automation”. Con una amplia experiencia en el desarrollo y fabricación de productos de automatización y control de maquinaria, la cooperativa englobada en Corporación MONDRAGON ha tenido siempre claro la importancia que tiene Italia para su negocio, donde “siempre hemos tenido ventas estables”.
Como explica Sánchez, en un principio lograron desde su sede principal de Milán un muy buen posicionamiento de sus visualizadores y controles para aplicaciones de torneado, y con el paso del tiempo, una vez superada la fuerte crisis de 2009, apostaron por aplicaciones de fresado y mercados alternativos, lo que les reportó una destacada situación en aplicaciones de fresado de alto valor añadido y clientes de encóderes lineales y rotativos. Sin embargo, y como añade el director de Negocio de CNC, “durante estos largos años también hemos pasado por momentos de crisis y apuestas más o menos exitosas. Pero de los pequeños fracasos hemos extraído enseñanzas para las posteriores apuestas”. Reflejo de ello, es la puesta en marcha en 2012 del centro tecnológico de fresado Ivrea, localizado en la región de Piamonte.
Este proyecto, junto con los desarrollos realizados en su sede central de Mondragón (Guipúzcoa) y la fuerte labor de promoción desempeñada en usuarios, distribuidores y fabricantes les ha permitido llevar a este mercado a números superiores a los previos de la crisis, convirtiéndose en uno de los principales países para Fagor Automation. Según confirma Sánchez, hoy en día se encuentran en una cifra récord de ventas en Italia, por encima de los 6,2 millones de euros y con perspectivas de poder acercarnos a los 7 millones este mismo año. “Y llegamos a esas cifras partiendo de los 3,5 millones en los que nos quedamos en 2009, en mitad de la crisis”.
A pesar de que el mercado italiano es altamente competitivo y exigente, está abierto a productos de otros países.
En el caso de Fagor Automation, “además de ingresos estables, nos ha permitido mejorar en gran medida tanto nuestros productos como nuestras maneras de atender al cliente. Y para esto último ha sido vital estar implantados en Italia y contar con personal local muy competente, lo que precisamente ha sido la búsqueda de ese personal una de la mayores dificultades que hemos tenido. Pero la implantación nos ha reportado unos beneficios que compensan con creces las dificultades vividas”, concluye Sánchez. De cara al futuro más inmediato, la cooperativa se va a trasladar a una nueva oficina en Milán más espaciosa.
Desde este enclave, así como desde su oficina de la región del Veneto y del centro Ivrea, continuarán abordando el mercado italiano, “clave para una empresa como Fagor Automation que quiere vender en el sector de la M-H en todo el mundo”.